sábado, 23 de febrero de 2013

Camille Claudel

EXTRAÑO AZUL EN LOS OJOS
La controvertida película sobre la escultora Camille Claudel, presentada en el Festival de Berlín y con Juliette Binoche como protagonista, sirve de pretexto para recrear la personalidad de esta mujer sensacional y libre.

Camille Claudel fue una mujer más guapa que cualquiera de sus intérpretes. Lánguida y altiva. Sus ojos tristes "de un azul tan extraño", como escribió su hermano, el escritor Paul Claudel, contradicen la altura del mentón  y la sensualidad de una boca cerrada en un gesto adusto. Camille mantuvo una difícil relación sentimental con Rodin, su maestro. Después, estuvo con el músico Debussy, pero al igual que con el escultor, Camille era la otra. Nada más morir su padre, su madre la encierra en un manicomio. Prohíbe las visitas: no hay mayor intolerancia que la que una mujer ejerce contra otra. La madre contra una hija libre. Los valores burgueses contra una vida desordenada, adelantada a su tiempo, loca: tal vez por eso las obras de Camille fueron del agrado del incorrectísimo Mirbeau. La tumba de Camille desaparece en el recinto donde la artista sufre 30 años de encierro. A ella siempre se la recordará como la mujer que no se conforma con ser musa de un artista y exige mirar con sus propios ojos. Hacer con sus manos La edad madura, El abandono, El vals ...Los bailarines se violentan, se apoyan en uno en el otro, se aman y se repelen en un dinámico giro que los entronca a la misma raíz y nos hace recordar que a menudo la realidad supera cualquier ficción.

Marta Sanz
Yo Dona, 23 de febrero de 2013


















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